¿Qué es el equilibrio emocional?
Con equilibrio emocional nos referimos a un estado mental caracterizado por la estabilidad y la sensación de bienestar. Las personas que llevan una vida interior en armonía y en calma han podido desarrollar esta facultad. Pero para algunas personas puede resultar difícil alcanzar esta meta, por lo cual pueden requerir de la ayuda proporcionada por un terapeuta.
Las personas que poseen un adecuado equilibrio emocional generalmente poseen respuestas emocionales que se adecúan a los conflictos que se enfrentan. El estado de ánimo y también las emociones mantienen sus fuerzas equilibradas. Significa que la persona ha logrado llegar a la paz mental, se ha conectado y reconciliado con el mundo que lo rodea.
Es usual observar que en las personas que no desarrollan esta capacidad la principal causa es la insatisfacción, con respecto a sí mismas y a la vida que llevan. La ansiedad, la baja autoestima y la depresión, son claros síntomas del desequilibrio emocional.
¿Cómo alcanzar el equilibrio emocional?
Alcanzar el equilibrio emocional depende de cada persona. Significa que las experiencias que se van sucediendo a lo largo de nuestras vidas sirven como importantes lecciones. Si estas experiencias han sido estresantes y pudimos reaccionar de forma positiva, significa que la persona es capaz de mantener un adecuado equilibrio mental.
Asimismo, nuestro desempeño social, académico y laboral, están estrechamente asociados con el equilibrio emocional. La manera en la cual afrontamos nuestras responsabilidades, es un claro indicativo de que llevamos en nosotros de forma innata la capacidad de gestionar efectivamente nuestras emociones.
A continuación se mencionan algunos hábitos y técnicas que permiten lograr alcanzar el equilibrio emocional. Son los siguientes:
- Prestar atención a nuestro bienestar y salud es imprescindible. Para poder llevar una vida plena es importante saber cuidar de sí mismo. Llevar una alimentación equilibrada, practicar ejercicio regularmente e involucrarse en actividades sociales; son sólo algunos ejemplos.
- Descansar ayuda a que la mente y el cuerpo funcionen correctamente. Se recomienda dormir un mínimo de 8 horas diarias, así como tomar siestas de al menos 10 minutos durante el día. Asimismo, se recomienda descansar en contacto con la naturaleza como en un parque o una visita a la playa. Es propicio desarrollar una buena sintonía entre el mundo interior con el exterior
- Valorar y agradecer lo que se tiene. El bienestar personal no sólo se basa en lo económico o en la cantidad de bienes físicos que posees. Es realmente gratificante reconocer a las personas que hacen un importante aporte a nuestras vidas. A ellas se les debe mostrar cariño y consideración.
- Probar cosas nuevas. Darnos la oportunidad de ser parte de eventos o actividades que son nuevas para nosotros es gratificante. Salirnos de la misma rutina diaria permite que el cerebro se ponga a trabajar al máximo. Este es un ejercicio de salud mental que también se asocia con el equilibrio emocional. Asimismo, se aprende a tomar decisiones, a enfrentar posibles riesgos y se aprende nuevos conocimientos.
- Compartir con familiares y amigos. El equilibrio emocional está estrechamente relacionado con la vida afectiva. Cualquier tipo de carencia es motivo suficiente para comenzar a desarrollar comportamientos y síntomas señala en el declive del estado mental. Pasatiempo con personas cercanas y de confianza ayuda a recuperar el buen ánimo,
- Aprende a expresarte. En ocasiones no sabemos comunicarnos con los demás, lo cual ocasiona que vivimos estresados, preocupados y con la sensación de sentirnos solos. Compartir nuestros pensamientos, ideas y aspiraciones; nos hace sentir libres y aceptados.
También las actividades físicas ayudan a liberar endorfinas en el cerebro, mismas que son responsables de un estado de ánimo más positivo. Con al menos 10 o 20 minutos de ejercicio al día es suficiente. Incluso la práctica de cualquier deporte es una excelente alternativa, además se trabaja la respiración y la concentración.